18 de septiembre de 2023
Cambiar nuestras costumbres arraigadas puede ser un desafío, especialmente cuando llevamos años haciéndolas de cierta manera. Hay un dicho popular que afirma que "a un perro viejo no se le pueden enseñar trucos nuevos". Sin embargo, esta idea no se sostiene, sobre todo cuando se trata de aspectos cruciales como la ciberseguridad. A pesar de que este concepto puede ser desconocido para muchos, su importancia se ha vuelto fundamental en los últimos años y está integrándose cada vez más en nuestro lenguaje cotidiano. ¿La razón detrás de este cambio? Es simple: el aumento de la actividad delictiva en línea. Aunque se ha hablado exhaustivamente sobre este tema, ha llevado a un cambio en la forma en que abordamos la seguridad en general, especialmente en el contexto digital. Lamentablemente, seguimos cometiendo los mismos errores de siempre. Aquí te presentamos 10 prácticas obsoletas que debemos abandonar en 2023 para fortalecer nuestra ciberseguridad.
Actualizar software regularmente: Mantén tu sistema actualizado con las últimas versiones de software y firmware para cerrar posibles vulnerabilidades que puedan ser explotadas por ciberdelincuentes.
Fortalecer contraseñas: Evita contraseñas débiles como "123456" o información personal. Utiliza contraseñas complejas con combinaciones de letras, números y símbolos, y cambia tus contraseñas periódicamente.
Precaución con Wi-Fi públicos: Utiliza redes Wi-Fi públicas con precaución, ya que algunas pueden ser falsas y utilizadas para hackeos. Opta por redes seguras o usa tus datos móviles en caso de duda.
Evitar clics impulsivos: Sé cauteloso con enlaces y archivos adjuntos en correos electrónicos o mensajes de texto. El phishing y el smishing son comunes; verifica la legitimidad antes de hacer clic.
Proteger todos los dispositivos: Cualquier dispositivo conectado a internet puede ser vulnerable. Asegúrate de proteger todos tus dispositivos, desde smartphones hasta sistemas de domótica, con medidas de seguridad adecuadas.
Navegar en sitios web seguros: Antes de ingresar información personal o hacer clic en enlaces, verifica la autenticidad del sitio web. Evita ofertas sospechosas que parezcan demasiado buenas para ser verdad.
Separar lo personal y lo laboral: Mantén separados los contactos y la información personal de los laborales en tus dispositivos para minimizar riesgos en caso de hackeos.
Cuidado con la información por teléfono: Nunca proporciones información personal o contraseñas por teléfono, ya que los estafadores pueden utilizar esta vía para obtener datos confidenciales.
Realizar copias de seguridad: Respaldar tus datos en la nube o en dispositivos externos ayuda a mitigar los daños en caso de ciberataque o pérdida de datos.
Seguridad en hogares inteligentes: Los dispositivos domóticos pueden ser vulnerables. Asegúrate de proteger adecuadamente tu hogar inteligente, cambiando contraseñas predeterminadas y actualizando el firmware.
Recuerda que adoptar estos hábitos ciber saludables te ayudará a proteger tus datos y reducir los riesgos de ser víctima de ciberdelincuentes.